Que pena siente el alma, cuando la suerte impia Se opone a los deseos que anhela el corazon Que amargas son las horas de la existencia mia Sin olvidar tus ojos, sin escuchar tu voz
Pero embargo aveces, la sombra de la duda que Por mi mente pasa como fatal vision que pena Siente el alma, cuando la suerte impia se opone A los deseos que anhela el corazon